sábado, 28 de octubre de 2006

It was one of those nights

Ella era algo así como una música de los ochenta, me hacía seguirla a un ritmo distinto. Lo tiraba todo lento, sin justificarlo demasiado. Yo tampoco lo pedía. Se caía, despacio; a un giro que nadie apuró. En algún momento pensé que me olvidaba de decir, que salteaba párrafos enteros. Lo pensé; nada más.
Había algo de dormir en la estación en todo eso. Una noche. Se partía o se volvía. Algo así.
Todavía hay cosas que no entiendo. Hay pequeñas cosas que lo hacían más dulce; nunca entendí por qué estaba lejos de ser empalagador. Pero siempre se me hizo difícil. No me resulta fácil caer en la explicación de lo cursi. Y un poco me resisto.
Sé que en el fondo había un ritmo que me movía. Lo presentí. Y todavía.

Se trata de muy pocas cosas en realidad. Este texto son pocas cosas. Sigo sin estar más cerca de donde estaba. Se multiplicaron las decisiones, tal vez.

A veces me siento paralizado, es cosa de un segundo. Es tal vez un flash. O un punto. Woody diría que una pelotita y una red. Qué sé yo.
Pero siempre hay una vuelta a la selva; creo que, primero, hay que decir hola. O disculparse si uno es atrevido.


Ezequiel

It felt so right

1 comentario:

Anónimo dijo...

Este texto NO son pocas cosas, dudo que no estés mas cerca de donde estabas...

Disculparse si uno es atrevido...je!


Besoo!