lunes, 12 de diciembre de 2005

Impresiones

Me olvidé todo, crema de enjuague, shampoo, jabón, jean, parlantes, cacao. Casi me olvido hasta el cepillo de dientes.
Luli me pide una lapicera y le digo que tengo, dice: estaba segura que eso no te ibas a olvidar (se ríe) lapicera y tu libretita. Tiene razón.

Un perro que nos ladra, cruzamos y nos sigue cinco cuadras ladrando, desde la vereda de enfrente. Miro hacia atrás mientras nos alejamos por una calle lateral, el perro nos mira desde el otro lado de la avenida.

Durante la mañana el sol te asesina, al mediodía se nubla, a la tarde el viento te vuela

Salimos y, como siempre, prendí la luz de la entrada. Volvimos y estaba apagada. No me acuerdo de haberla apagado. No faltaba nada.

Nos bañamos, comimos y salimos. Volvimos después de caminar y dar unas vueltas. Nos tiramos en la cama, me dormía. Luli fue a lavar los platos. El calefón estaba en encendido, con el gas abierto pero sin llama. Colgamos.

Compramos comida en "El lechón rengo". Tienen de todo. Pizza, pastas, carne a la parrilla, empanadas, pescado. Muy rico.

Los balnearios de Playa Grande están totalmente cercados.

Castigo. No más besos en la esquinita por un día.

En el barrio Stela Maris casi todas las casas parecen de cuentos. De piedra, techo a dos aguas y balcones con baranda de madera. Luli se emociona y habla de libros de cuentos con gnomos y de su tío Nestor.

Alfonsina Storni se hundió en la playa La Perla, qué poética.

Luli, como siempre, mira los tachos de basura y analiza los diseños. Habla de la Bauhaus (¿se escribirá así?).

Salgo a hacer las compras mientras Luli limpia un poco la casa. Parece una pareja organizada.

Hasta ahora me ganó al Chinchon tres de las cuatro veces que jugamos. Yo gané sólo una, claro, con chinchón, tenía 86 puntos y ella algo así como 10.

Luli no me deja leer en la playa. Yo me aburro porque ella busca caracolitos diminutos en los límites de nuestra lonita. Deja de buscar para que no la deje sola, deja de buscar sólo para que no lea.

Los lobos marinos son una maza.

Luli se enoja. Le molesta que cada vez que le pregunto su opinión, luego de decirmela yo le replique con un: ¿Vos decís?.

Martín

Wait till I come back to your side
We'll forget the tears we've cried

1 comentario:

lu* dijo...

aaaay... a mi tb se me poegó el vos decís

ayer una rubia hermosa nos negó una propuesta bizarra a m
i y a un amigo. decepción. después te cuento.

te querio, che, el 22 nos juntamos, no?