Hay, en una habitación, una chica, una cámara de video y una banana. La habitación parece fría, de techos altos y paredes un tanto gastadas - en algún momento habían sido amarillas-. Un velador envejecido ilumina pegado a la pared izquierda. A la derecha aparece, cada tanto, el vuelo de una cortina - la ventana parece estar abierta-. La cámara de video es tomada por alguien que la eleva y apunta hacia la chica. Ella dice algo así como: - “Tal vez me animo”. Una mueca burlona le cruza la cara mientras habla, los ojos toman un brillo peculiar. Desgraciadamente no reflejan a quien lleva la cámara que se balancea cada tanto y gira en derredor de la chica.
Dice demasiadas futilidades, tarda poco en dejar de hablar. Toma la banana y comienza a pelarla, intenta hacerlo de manera sensual. Cuando la fruta ya está pelada y comienza a meterla en su boca, la cámara se aproxima de manera violenta, haciendo un primer plano excesivo. Se escucha una voz de hombre que exclama "Muy bien" (suena accidental y vergonzoso en las últimas sílabas).
Luego de un par de maniobras bucales, la banana se quiebra en la boca de ella. Se escuchan risas y la imagen se ensombrece. Las risas continúan brevemente mientras dura la oscuridad y finalmente el video se termina.
jueves, 7 de junio de 2007
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